viernes, 11 de noviembre de 2016

"Yo tampoco soy feliz"

— ¿Te encontraste con ella de nuevo?
— Sí, estuvimos en el mismo lugar anoche. Apenas la vi, reconocí a la chica tierna que conocí hace un par de años.
— ¿Y qué pasó? ¡Cuéntame todo!
— No pasó nada.
— ¿Cómo que nada?
— Nada, no pasó absolutamente nada. Sólo la vi.
— Pero eso ya me lo dijiste.
— La vi de lejos.
— ¿No se saludaron?
— No.
— ¿Por qué? Tú sí que estás loco, llevas meses diciéndome que te mueres por verla de nuevo y cuando por fin logras encontrarte con ella. Ni siquiera la saludas.
— Es que tú no entiendes.
— No, créeme que no entiendo nada.
— Ella se reía todo el tiempo, se notaba que estaba feliz.
— Pero, ¿Por qué no la saludaste?
— Cómo te explico que me estaba acercando cuando de pronto apareció alguien que fue directamente hacia ella, le agarró la cara y le dio un beso. En ese momento descubrí que había perdido a la mejor chica que pude haber conocido en mi vida... para siempre.
— Debiste buscarla antes.
— Debí... no lo hice. Probablemente sea de lo único que me arrepienta. Porque yo odio arrepentirme de algo, pero esto es una clara excepción.
— A veces es ahora o nunca, yo también lo aprendí.
— Pero sabes que, luego pasó algo muy extraño. Ella me miraba como si quisiera decirme algo y no sabía qué hacer en ese momento.


— ¿Y qué hiciste? ¡Cuéntame! 
— Escribí en un papel esto: "Te deseo toda la felicidad del mundo, porque tú fuiste mía. Si tú estás feliz, yo también lo estaré... así tú no estés a mi lado. No importa nada más" y antes de irme se lo entregué.
— ¿Te dijo algo? 
— No en ese momento. Cuando llegué a mi casa tenía un mensaje en mi celular que decía: "Yo tampoco soy feliz"...

jueves, 10 de noviembre de 2016

“Voy a volver a ser yo"

Siento una fuerte presión en el pecho que me está apretando cada vez más, y un nudo en la garganta cada vez más grande que me está impidiendo respirar, siento como si mi estómago se hubiese encogido y también se hubiese anudado, son nudos que cada vez serán más difíciles de deshacer, siento que no soy yo, y que todo el mundo está en contra de "este pobre poeta" al fin y al cabo pienso que me lo estoy buscando "yo solito", demasiado carácter para mi gusto y seguro que para los demás, diría yo, solo debería sacarlo en las situaciones que realmente lo requieran.

Cada día la situación empeora, me veo más solo aún estando rodeado de gente, no se porque me siento así, pero estoy distinto y cada vez este pensamiento me está torturando más, necesito salir de "estado de desesperación" ¡ya! necesito volver a ser yo, necesito volver a reírme a carcajadas por todo, necesito recuperar mi sonrisa, esa que me acompañaba a todas partes, ¡la hecho de menos!, hecho en falta mi propia personalidad cada día, me quiero recuperar a mi, quiero volver a pensar como antes, quiero ser ese, chico dulce y cariñoso a la que mucha gente (he de añadir que me refiero a aquellos que me importan) quería, me resulta tan rara esta situación, es amarga, es desesperante, es desoladora, no saber porque estás cambiando, quiero saber porque ahora soy tan "antipático", tan enfadico, tan "todo lo veo mal" y "todo está mal", no se si será que me afectan demasiado los pequeños problemas que pone en mi camino la vida, pero siento que me estoy perdiendo, y me quiero encontrar, lo necesito, NECESITO SER YO OTRA VEZ, y creo que voy a empezar a partir de este mismo instante a echarle el pulso a "esto", le pondré de nombre "MI GRAN ESTUPIDEZ PASAJERA" y digo pasajera porque pienso salir victorioso de esta batalla, es mi única opción, voy a volver a ser yo, solo espero conseguirlo pronto, para ello tengo que usar las armas que están a mi alcance;

 

1.Voy a darle menos importancia a aquello que me atormenta y que no se merece tanta atención por mi parte.
2.Voy a sonreír aunque ahora sea "de mentira" hasta volver a mirarme al espejo y ver "mi verdadera sonrisa".
3.No voy a atormentarme tontamente con cualquier cosa sin sentido.
4.Voy a mirar siempre el lado positivo de todo.
5.Voy a cargarme ciertas cualidades que no me pertenecen y se han aferrado a mi, las voy a arrancar sin piedad para que no quede ni rastro de ellas.
6. FUNDAMENTAL: VOY A VOLVER A SER YO.

miércoles, 9 de noviembre de 2016

"Quiero ser tu princesa!¡"

Me sigue sorprendiendo cómo nos afecta que un hombre nos llame “Princesa”.  Es como apretar el botón de la suerte. Con un mando a distancia (el móvil en este caso) activan un poderoso elixir en algunos cerebros femeninos.
Me pregunto cuánto poder tienen algunas palabras.

Pero no me refiero a cualquier contexto. Es una palabra tierna, que encierra un mensaje de cortesía y mimo - PRINCESA-

Pero ay….cómo duele cuando viene de un galán que te quiere conquistar.  Y cuántas vueltas somos capaces de darle, si tenemos tiempo o nos interesa el tipo como a continuación detallo:

Una amiga (inteligente) trataba de analizar un mensaje de un ex que en tiempo presente le decía “Buenos días Princesa”. Al analizarlo con la sonrisa de oreja a oreja y pegando saltitos de alegría estaba enviando información a su sediento cerebro de que ése era un mensaje maravilloso.

El galante y arrepentido ex (estado de ánimo de su ex según ella) se había dado cuenta de su error tremendo al dejarla!¡

Otro mensaje al cabo de media hora: “
un beso Princesa”. y el extravagante gesto de enviar una sonrisa con el malvado muñequito, que tanto odio y que por cierto utilizo casi siempre por comodidad de no pensar un poco más qué expresión tengo en mi cara y cómo describirla.

Al noveno pitido de móvil el mensaje con la palabra magica. Nuestra amiga estaba levitando entre emoción y emocion.
Las demás nos íbamos mirando intrigadas de saber el final de la historia. RIP. . .

Y aunque no era el mejor momento le pregunté si esas mismas frases sin la palabra "Princesa" le producirían la misma satisfacción y el mismo nivel de oxitocina en la sangre…
Me contestó un rapidísimo…
”Hombre no….”.

No es lo mismo que me digan “Buenos días Princesa, que Buenos días sin más”.
Y entonces le pregunté…¿y si te hubiera puesto solamente Princesa sin buenos días…?..

Me contestó igual de rápidamente que antes: “Hombre pues monísimo…..
me encanta”…

”luego entonces…el secreto está en utilizar la palabra Princesa…”.

Me miraba rogándome que me callara de una vez y la dejara disfrutar de su recién estrenado nuevo estado civil: “reconquistando a mi ex desesperadamente”.

Les solté una disertación antropológica sin mucho fundamento expresando mi sentimiento de cuánto daño nos hicieron de pequeñas, a nosotras y a ellos. A nosotras por ponernos ese ideal como lo “más” y a ellos porque sus madres (mujeres por cierto) les dijeron que a las chicas se las trata como princesas para conquistarlas y para que te quieran.  La Princesa tiene debilidades, es frágil y necesita ser rescatada. Que le maten a un dragón y que le compren un castillo con ventana en la torre para tirar la trenza súper larga que no se corta jamás porque entonces no puede entretenerse peinándola.

Básicamente es que si un hombre te dice “buenos días mi princesa" se convierte en la palabra mágica la llave maestra.
Es nuestro piropo favorito todas votamos (yo también), que preferíamos que nos llamaran Princesas. Me quejo y me río al mismo tiempo, tratando de entender por qué a algunas mujeres (a muchas no, lo digo por si algún caballero lee esto y se cree que es infalible), nos encanta y nos debilita esa palabra.
Es un arma arrojadiza, una anestesia, un ataque de tontería.  Un mensaje que por muy buzón lleno que tengas jamás borras. Donde pone “Princesa” ése mensaje se queda en tu móvil para siempre jamás. Y si te lo dicen en persona, la sonrisa de estúpida ya no tiene comparación con nada.

Otra de las afortunadas del grupo nos enseñó otra joya de mensaje “beso para mi princesa morenita”… todas aplaudieron al precioso mensaje…y yo me preguntaba…..¿es que este chico tendrá más princesas, que las tiene que clasificar por color de piel?....
Me dejaron de hablar por hacerles pensar que sus mensajes no eran sinceros, y nada más lejos de la realidad….me levanté muy digna diciendo que yo no necesito que me lo digan, porque ya sé que lo soy… aunque hoy día nos toque ser guerreras y dulces al mismo tiempo y vivir en el vértigo permanente de lo que deberíamos haber sido, lo que queremos ser y lo que verdaderamente somos.

Por cierto,  admito y confieso que ….me encanta que me lo digan! …como a la mayoría de ese tipo de mujeres más clásicas. Las que nos hemos criado entre cuentos y películas de Disney
que han vuelto a dignificar el piropo….


Ahora te toca adivinar qué tipo de Princesa eres…y por favor..no me hagas ni caso, y cuando recibas un mensaje con “Princesa”.. sonríe que seguro que es sincero!...sobre todo si detrás hay hechos.
Feliz reinado! Nunca dejes que te quiten tu sitio seas del tipo que seas…y nunca dejes de vivir tu cuento.

lunes, 7 de noviembre de 2016

Tal vez naci para caminar sola por el mundo, y tendré que acostumbrarme a ello.

 Te creía cuando me decías que me ibas a bajar la luna un millón de veces para quitarme la tristeza. 

Pero, la luna sigue arriba observando mi tristeza y mi soledad.

Vivo en completa soledad, pero no me siento sola. . .


“A pesar de todo me gusta caminar sola y decidir que camino quiero tomar, el ritmo que quiero llevar y cuantos pasos voy a dar.

domingo, 6 de noviembre de 2016

Nadie es irremplazable!!… ¡Suena fuerte! Muchos pensarán que si nadie es indispensable, quiere decir que todos son descartables. Pero no es así. Existe una gran diferencia entre ser indispensable y no ser descartable.Sin embargo, una cosa es que apreciemos a quienes nos rodean y otra muy distinta que pensemos que no podemos vivir sin ellos.

El que alguien sea indispensable en nuestra vida significa que se ha convertido en un ser al que necesitamos y del que dependemos. El problema de las relaciones basadas en la necesidad es que se establece una dependencia por parte de la persona necesitada y puede llegar a volverse una obsesión. No querer estar sin la persona objeto de afecto ni un solo segundo. Llamarle, mandarle mensajes, aparecerse en su camino, etc. Esto termina asfixiando a la otra persona y en lugar de “retenerla”, la alejamos.

Existen casos en los que nos aferramos a una persona y pensamos que es nuestro bote salvavidas. No la queremos soltar, porque creemos que sin ella no vamos a sobrevivir. En nuestra desesperación por evitar que se vaya, terminamos tomando medidas extremas que no sólo nos dañan a nosotros mismos, sino que también a los demás.

Entre las acciones desesperadas tenemos el caso de mujeres que para retener a un hombre, se embarazan. Pacientes que para obtener la atención que quieren de sus médicos, entran en crisis. Hombres que para que una mujer no los deje, se ponen de alfombra. Amigos que chantajean con contar secretos del otro si éste se va.

¿Para qué? ¿Por qué esforzarse tanto por mantener una relación o por buscar una relación con alguien que no quiere tenerla con nosotros? Es contradictorio e irónico que en ocasiones nos desvivimos por personas que ni siquiera se dan cuenta de que existimos, e ignoramos a aquellas que darían lo que fuera por nosotros.

¿Saben por qué les digo que nadie, absolutamente nadie es indispensable? Porque durante muchos años esa persona ni siquiera existía para nosotros, no había aparecido en nuestra vida y nosotros funcionábamos perfectamente, ¿o no? La persona llegó y por alguna razón nos enganchamos de ella y por eso pensamos que ya no podemos estar sin ella. Pero no es cierto. Les aseguro que si ustedes dejan ir a cualquiera que creen que es vital para ustedes, que en algunos casos incluso dicen que sin esa persona se mueren… ¡no se van a morir! Van a llorar unos días, van a sentirse tristes por ya no tenerla, les va a doler, pero al cabo de unos días, unas semanas, unos meses o tal vez unos años, van a seguir con su vida, van a seguir respirando. Entonces se van a dar cuenta de que esa persona no era indispensable, de que ustedes podían vivir sin ella.

Por otro lado, así como nadie debe ser indispensable para ti, también debes saber que tú no eres ni debes ser indispensable para nadie. ¿Sabes por qué? Porque entonces vas a estar generando una relación de dependencia hacia ti y esa persona va a querer y va a exigir que tú llenes sus vacíos emocionales. Y esa es una carga demasiado pesada y una responsabilidad que ninguna persona debe asumir por otra. Cada quien es responsable de su vida y de su felicidad. Tú no tienes que hacer feliz a nadie, así como nadie más tiene la tarea de hacerte feliz a ti.

No todas las personas llegan para quedarse a nuestra vida para siempre. Sin embargo, eso no quiere decir que sean descartables o que no sean importantes. No se trata de reemplazar a una persona por otra, sino de darle su propio valor a cada una. De saber que cuando una relación termina, no es porque creemos que esa persona no significa nada, sino porque así se dieron las circunstancias. La persona cumplió su misión en nuestra vida y el que ella se vaya no nos va a matar. Vamos a seguir viviendo y vamos a estar bien.

Por lo tanto, debemos aprender a establecer relaciones sanas, basadas en el amor, la comprensión y el respeto. Relaciones maduras en las que cada quién es responsable de su propia felicidad y son dos personas las que deciden compartir parte de sus vidas con otra, porque disfrutan la compañía de esa persona, no porque piensan que sin ella se mueren. Las relaciones sanas están basadas en el amor, y el amor es libre.

Las personas no son indispensables, porque el mismo dios lo dice. Porque los seres humanos son seres humanos y por esa sencilla razón nos van a fallar. No porque sean malos, no porque nos quieran hacer daño, no porque no nos quieran, sino que simplemente porque son humanos tal como lo somos nosotros.

Hagamos de vida tu único indispensable y eso va a ayudarnos a que el resto de las relaciones las pongamos en el lugar adecuado.

No esperes mucho, no te ilusiones mucho, no te enganches mucho, porque ese mucho, duele mucho.

"Solía pensar que la peor cosa en la vida era terminar solo. No lo es. Lo peor de la vida es terminar con alguien que te hace sentir solo."
Sentirme mal acompañad@

Es cierto eso que dicen que las palabras acuden a ti en el momento exacto que las necesitas...me ayudan muchísimo tus palabras...dados mis temores actuales...INFINITAS GRACIAS.



Espero que te sientas, ,,solo.

Lo peor no es estar solo... sino estar con alguien que te hace sentir solo.

terminar solo puede ser la mejor cosa de la vida. Nadie te hace sentir solo. Siempre estás mínimo contigo.

No hay que sentirse solo si es así examina tu situación

y continuar viviendo allí...en esa soledad! ♥
Hoy empieza todo.Un cambio? Un camino nuevo? Te atreves? Sólo tu puedes hacer que se haga realidad HOY!!

Alguien a quien tu amas con todo tu ser, pero en el fondo sabes que ellos por ti no sienten nada...

Lo mas real , cuanta gente no se acostumbra a vivir así y cuando se da cuenta ya es tarde !!!

• "Enamórate", decían... "Es lo más bonito del mundo"...

“Si usted va a salir de mi vida, le pido una cosa, una vez que te has ido y ves que estoy bien, no te atrevas a volver”
Después de tanto vivido, de tantas risas compartidas, después de bellas palabras, de muchos “te quiero” y pocos “te amo“, después de mucha pasión, después de una historia de amor, todo todo todo todo cambió.

No sé si puedes llegar a aburrirte de una persona que creíste era tu complemento, de una persona tan retorcida como tú, era como verme en el espejo, con mis mismos gustos, locuras y pasiones….

“Cuando pienso en lo que hemos pasado, y te busco y no estás a mi lado, siento que la vida aún nos debe un mejor final” 

El y ella, ella y el, siempre serán la historia de los amantes que fueron, son y permanecerán, siempre estarán en un lugar importante de la mente y del corazón del otro, siempre se van a pertenecer, siempre serán ellos aunque se ignoren y olviden momentáneamente…..

Soy un poeta enamorado


Hoy es un hermoso día... Por favor sonríe, si esta nublado eso quiere decir que las nubes son rebeldes y no quieren permitir que el sol nos dañe. Y si es un día soleado el sol ha sido inteligente y le ha ganado la discusion a las nubes. Mi nombre es Adán MC's sin  "E"              Lo que reblogueo y lo poco que publico es lo que siento. Las personas que me "conocen" siempre me veran sonriendo, ciertamente soy , un desastre total de persona. Me encanta escuchar a las personas, si necesitas deshagorte con alguien aquí estoy no hay problema, yo podre escuchar lo que tengas que contarme, igual puedo aconsejarte, considero que las personas siempre necesitan de alguien para estar bien porque eso de hablar contigo mismo no es lindo.

 Detesto los psicologos y psiquiatras desgraciada y afortunadamente te dan solo pastillas. & al final te fuiste sin decir adiós.